Cómo meditar acostado: medita fácilmente en tu cama
Lo mejor de la meditación es que puedes hacerla en cualquier momento y lugar. No necesitas un lugar ni un equipo especial. De hecho, uno de los mejores momentos para meditar es justo antes de acostarse.
Meditar en la cama puede ayudarte a relajarte y a dormirte más fácilmente. También puede ayudarte a despertarte sintiéndote, renovado y rejuvenecido.
A continuación te explicamos cómo meditar tumbado:
Cómo meditar acostado
1. Ponte cómodo.
Túmbate boca arriba con la cabeza apoyada en una almohada. También puedes probar a sentarte en la cama con las piernas cruzadas o tumbarte de lado.
2. Cierra los ojos
y respira profundamente varias veces. Inhala por la nariz y exhala por la boca.
3. Concéntrate en tu respiración.
Mientras respiras, presta atención a las sensaciones de tu cuerpo. Siente la subida y bajada del pecho y la expansión del vientre.
4. Olvídate de los pensamientos.
Si ves que tu mente divaga, simplemente vuelve a centrarte en la respiración. No te preocupes si no consigues aquietar la mente por completo. Vuelve al momento presente.
5. Sé paciente.
La meditación requiere práctica, así que no te desanimes si no es fácil al principio. Sigue haciéndolo y verás los resultados . Aquí podrás leer cómo meditar fácilmente
6. Termina la sesión.
Cuando estés preparado, abre lentamente los ojos y siéntate unos instantes antes de levantarte.
7. Hazlo todos los días.
Cuanto más medites, más beneficios experimentarás. Intenta hacerlo al menos una vez al día, preferiblemente a la misma hora cada día.
Empieza con sólo 5 ó 10 minutos de meditación y ve subiendo a partir de ahí. Te sorprenderá lo bien que te sentirás después de unos pocos días de práctica regular.
Si te encuentras haciendo tus primeros pasos aquí te dejamos la guía definitiva de meditación
