Cuando te sientes mal, puede ser difícil encontrar la motivación para seguir adelante. Pero si te tomas unos minutos para meditar, puedes darte un impulso mental y emocional que te ayudará a superar cualquier reto al que te enfrentes.
Aquí tienes algunos consejos para meditar cuando te sientas mal:
1. Busca un lugar cómodo para sentarte o tumbarte.
2. Cierra los ojos y concéntrate en tu respiración.
3. Deja ir cualquier pensamiento o emoción que te cause estrés o ansiedad.
4. Visualízate en un lugar tranquilo y feliz.
5. Repite afirmaciones positivas para ti mismo como "soy fuerte" o "puedo hacerlo"
6. Cuando termines, respira profundamente unas cuantas veces y abre lentamente los ojos.
La meditación puede ayudarte a encontrar la paz interior y la calma en medio de los momentos difíciles. Si te tomas unos minutos para meditar cada día, estarás mejor equipado para hacer frente a cualquier reto que se le presente.