De acuerdo con el Eneagrama, cada uno de los nueve tipos de personalidad se define por una creencia central particular sobre cómo funciona el mundo. Esta creencia central impulsa sus motivaciones y temores más profundos, y fundamentalmente da forma a la visión del mundo de una persona y la perspectiva a través de la cual ven el mundo y las personas que los rodean.
Nuestras creencias fundamentales no son necesariamente incorrectas, pero pueden ser limitantes y operar como “anteojeras” para las personas. Comprender nuestro tipo de Eneagrama y cómo colorea nuestras percepciones puede ayudarnos a ampliar nuestra perspectiva y abordar las situaciones de manera más efectiva.
Comprender el tipo de Eneagrama de una persona nos ayuda a ver por qué se comporta de la forma en que lo hace. Cada tipo de Eneagrama tiene un conjunto de creencias fundamentales que lo motivarán consistentemente a tomar acciones particulares y lo guiarán para tomar ciertas decisiones. Comportamientos que pueden parecer confusos o contradictorios a menudo pueden explicarse cuando entendemos el tipo de Eneagrama de una persona.
El Eneagrama también nos ayuda a comprender cómo reaccionan las personas ante el estrés. Al describir cómo cada Eneatipo se adapta y responde a situaciones tanto estresantes como de apoyo, el Eneagrama muestra oportunidades para el desarrollo personal y proporciona una base para la comprensión de los demás.