Es probable que los Tres del Eneagrama valoren los logros y quieran ser los mejores. Por ello, la eficiencia, los resultados, el reconocimiento y la imagen son muy importantes para ellos. Los Tres se esfuerzan por tener éxito en el campo elegido y tienden a ser muy flexibles y dispuestos a adaptarse para lograr sus objetivos. En el mejor de los casos, los demás experimentarán a los Tres como trabajadores, con principios y receptivos, que ofrecen los dones de la esperanza y la integridad al mundo. En un estado enfermizo, la necesidad de logro sobreexpresada de los Tres puede parecer engreída e inconstante. Esto se deriva de un sentido de autoestima que se basa en lo que hacen los Tres, en lugar de quiénes son.
Charla con uno mismo
“El mundo valora a los ganadores. Debo tener éxito a toda costa. Debo evitar el fracaso. Soy lo que hago: para ganarme mi lugar, debo ser el mejor en lo que hago”.
Los dones del Eneagrama Tres incluyen:
Ambición: los Tres son ambiciosos y tienen la voluntad y la energía para esforzarse por ser los mejores en cualquier cosa que emprendan. Ellos creen en su capacidad para tener éxito.
Eficiente: El ingenioso Tres sabe cómo hacer las cosas de manera eficiente y productiva.
Adaptable: además de estar dispuesto a adaptarse para lograr sus objetivos, los Tres son capaces de adaptarse hábilmente a diferentes situaciones, personas o entornos.
Impulsado: La gran energía y el entusiasmo de los Tres por los proyectos hacen que las cosas se hagan y empujan a otros a desempeñarse también.
Orientado a los resultados: Establecer metas y esforzarse para lograrlas es tan natural para los Tres como respirar. Están enfocados en el resultado final.