Mientras que la personalidad determina lo que piensas y cómo te comportas, los trastornos de personalidad están marcados por pensamientos y comportamientos que son perjudiciales y angustiantes en la vida cotidiana. Alguien con un trastorno de personalidad puede tener problemas para reconocer su condición porque sus síntomas están arraigados en su personalidad.
Los trastornos de personalidad incluyen el trastorno de personalidad paranoide, el trastorno de personalidad esquizoide, el trastorno de personalidad antisocial, el trastorno límite de personalidad (BPD) y el trastorno de personalidad narcisista (NPD).
Si bien los síntomas de los trastornos de la personalidad varían según la afección, algunos signos comunes incluyen:
Comportamiento agresivo
pensamiento delirante
Desconfiar de los demás
Emociones planas (sin rango emocional)
Falta de interés en las relaciones.
Violar los límites de los demás
Algunas personas con TLP también experimentan pensamientos o conductas suicidas.
Si tiene pensamientos suicidas, comuníquese con la Línea Nacional de Prevención del Suicidio para recibir apoyo y asistencia de un consejero capacitado.
Para obtener más recursos de salud mental, consulte nuestra base de datos de la línea de ayuda nacional.
Si le preocupa que elementos de su personalidad contribuyan al estrés, la ansiedad, la confusión o la depresión, es importante que hable con un médico o un profesional de la salud mental. Pueden ayudarlo a comprender cualquier condición subyacente que pueda tener.
A menudo es difícil vivir con un trastorno de personalidad, pero existen opciones de tratamiento, como terapia y medicamentos, que pueden ayudar.